Ese fuego en el que nos quemábamos era casi perfecto. Era un calor abrazador generado por nosotros, era saber que estábamos ambos ahí y siempre lo estaríamos. Lo amo. Eso es. Nos amamos y de pronto surge ese fuego, ese calor de nosotros. Y nada más importa. Siempre seremos él y yo, hasta el fin de los tiempos. Les juro, nunca podría dejarlo, nunca podría estar lejos suyo. Porque él tiene esa "cosa" que no te deja soltarlo. Ni el tiempo podría ser suficiente para separarnos, porque lo nuestro es mucho más que eso. Lo nuestro es algo que no alcanzan las palabras para describirlo. Es algo que, va mas allá de cualquier cosa, que sobreviviría a cualquier cosa. Porque es algo infinito, porque es algo que casi llega a la perfección absoluta. Es algo que no tiene que seguir ninguna regla, porque ponerle algún tipo de límite o restricción sería inútil, porque no lo necesita. Porque decir que le falta algo sería mentir, y también lo sería decir que le sobra. Es así como tiene que ser, y es así como siempre quiero que sea. Tiene que ser así. Nos amamos, ¿hacen falta más palabras?